Como padres queremos el máximo bienestar para nuestros pequeños. Pero el uso de mecanismos artificiales de climatización nos hace pensar si es malo el aire acondicionado para los bebés o si, por el contrario, es una buena opción para mantener un ambiente confortable a su alrededor.
Indudablemente siempre debemos de seguir los consejos de nuestro pediatra que dependerán de las condiciones de salud de nuestro bebé.
Las altas temperaturas pueden provocar que los bebés se sientan molestos y estén incómodos. En esos momentos puede surgirnos la duda de si el aire acondicionado para bebés es malo. Hoy vamos a hablar sobre cuál es la mejor temperatura de aire acondicionado para bebés porque, en sí, y utilizado correctamente, aclaramos que no es malo el aire acondicionado para los bebés.
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Aire acondicionado para los bebés ¿es malo?
De entrada, no. No es malo el aire acondicionado para los bebés.
Sin embargo, tanto ellos como los niños o los ancianos son especialmente sensibles a cambios bruscos de temperatura, por lo que es conveniente observar ciertas precauciones, como a qué temperatura poner el aire acondicionado para un bebé o comprar un aparato de aire acondicionado de buena calidad.
Temperatura de aire acondicionado para bebés
El aire acondicionado está presente en muchos espacios de nuestras vidas. Tanto en casa, como en el trabajo, las tiendas, los bares o en el coche, la temperatura puede variar en torno a los 10ºC y los 15ºC del exterior a un sitio cerrado.
Este contraste brusco de temperaturas puede resultar perjudicial para los más pequeños, por eso es conveniente tener en cuenta dos factores fundamentales y no si el aire acondicionado para bebés es malo en sí.
La humedad y la temperatura son dos aspectos que debes tener bajo control cuando hay un bebé de por medio. En este caso, lo mejor es que la temperatura ambiente se mantenga entre 22ºC y 24ºC durante el día y entre 18ºC y 20ºC durante el sueño, y que hayamos procedido a regular el porcentaje de humedad.
Humidificador y deshumidificador, los reguladores de humedad
Lo normal es que el aire acondicionado reduzca el porcentaje de humedad en el ambiente, por lo que puede ser necesario evitar cierta sequedad con el uso de un humidificador de aire y prevenir daños en las mucosas de los pequeños.
Sin embargo, al igual que un ambiente seco puede ser perjudicial, el exceso de humedad permite un mayor crecimiento de ácaros y hongos que multiplican el riesgo de que el bebé padezca algún tipo de enfermedad respiratoria.
Para solucionar este problema, lo mejor es contar con un deshumidificador que elimine el exceso de humedad y mantenga la estancia entre un 40% y un 60% de porcentaje de humedad.
Actualmente, en el mercado hay equipos que permiten tener controlada la temperatura y la humedad durante las 24 horas del día en todas las estancias de la casa, lo que constituye una alternativa perfecta para no tener que regular constantemente la temperatura de aire acondicionado para bebés.
Ventilar con regularidad, el mejor sistema
Independientemente del control de humedad y temperatura de una estancia, sobre todo ante la presencia de un bebé, lo mejor es mantener unas rutinas diarias de ventilación adecuadas en todas las estancias.
Un ambiente limpio y ventilado permitirá un mayor control de la temperatura de aire acondicionado para bebés y un entorno más saludable para evitar el debilitamiento de su sistema inmunológico.
Incidencia indirecta del aire
Evita que el flujo de aire incida directamente sobre el pequeño, ya que en ese caso sí que es malo el aire acondicionado para los bebés.
La corriente de aire artificial aplicada de forma directa puede causar enfriamientos que deriven no solo en procesos de tos o estornudos puntuales, sino bronquitis, faringitis o neumonía.
Los dispositivos de aire acondicionado permiten regular la dirección de salida del aire, permitiéndote dirigirlo en varias direcciones que eviten la zona donde está descansando el bebé.
Apaga el aire acondicionado durante la noche
Lo mejor para el descanso del bebé es enfriar la habitación primero con aire acondicionado antes de llevarlo a la estancia para acostarlo. El tiempo en que el dispositivo refrigerará la habitación hará que la temperatura sea lo suficientemente confortable.
Para evitar que el bebé se enfríe en exceso, lo mejor es apagar el aire acondicionado durante la noche. La temperatura corporal del bebé y la temperatura del exterior descienden durante la noche, por lo que no será necesario refrigerar tanto el ambiente.
Una “Rebequita” por si refresca
Cuando salgas de casa, lleva siempre una mantita o una prenda de abrigo, como una “Rebequita”, para el bebé para esos momentos en que entras en un sitio público, como una tienda o un centro comercial, y la temperatura del aire acondicionado está demasiado baja.
En verano, muchos establecimientos y transportes públicos no suelen tener una buena temperatura de aire acondicionado para bebés, lo cual es perjudicial para los pequeños.
Con una prenda de abrigo o una mantita podrás cubrir al bebé y evitar ese cambio térmico.
Evita los cambios bruscos
De igual manera que es conveniente tapar al bebé ante una bajada brusca de temperaturas, también es conveniente acostumbrarlo a un aumento excesivo de las mismas, sobre todo evitando los temidos golpes de calor.
Antes de salir de casa, sube la temperatura del aire acondicionado o apágalo para que la diferencia de temperaturas entre el interior y el exterior sea más equilibrada y el cambio más paulatino.
La importancia de un buen mantenimiento del aparato de aire acondicionado
Cuidar los filtros del aparato de aire acondicionado y limpiarlos de forma regular evitarán la acumulación de suciedad y permitirán garantizar un ambiente más saludable para los bebés.
El mantenimiento adecuado de los aparatos de aire acondicionado evita la proliferación de bacterias, que pueden causar infecciones respiratorias a los bebés.
De hecho, la Asociación Española de Pediatría incide especialmente en la importancia de realizar un correcto mantenimiento de los equipos y limpiarlos adecuadamente, con cambios regulares en los filtros, para evitar problemas respiratorios a los más pequeños.
El aire acondicionado puede ayudar al bebé a descansar
El aire acondicionado puede ayudar a los bebés a estar más cómodos cuando las temperaturas son demasiado altas y evitar los temidos golpes de calor, sobre todo teniendo en cuenta que los pequeños son un sector poblacional especialmente sensible a estos cambios bruscos de temperatura.
En resumen: no es malo el aire acondicionado para los bebés si no se les expone de forma incorrecta al mismo y tenemos cuidado en los parámetros de confort de la temperatura y la humedad.
Una buena alternativa para el confort ambiental
Una vez que se tienen en cuenta todos los factores para que el aire acondicionado no sea perjudicial, como la incidencia directa del flujo de aire, un correcto mantenimiento de los equipos o apagar el dispositivo en horario nocturno, el aire acondicionado es una de las mejores alternativas para soportar las altas temperaturas.
Para un bebé no solo puede constituir una patología grave la complicación de un simple catarro, sino que un golpe de calor puede también tener resultados nefastos.
El aire acondicionado, usado correctamente, puede ser un gran aliado regulando la mejor temperatura de aire acondicionado para bebés.
Eso sí, todos estos consejos son útiles siempre y cuando el aparato de aire acondicionado que elijas reúna unos mínimos en cuanto a calidad y eficiencia, de ahí que sea conveniente comprar un buen dispositivo de aire acondicionado.
