Un hogar domotizado no solo es un hogar innovador, sino eficiente. La domótica llega a nuestros domicilios para conectarnos con nuestros aparatos y programar distintas acciones que nos permitan controlar nuestra casa de forma centralizada.
Saber cómo funciona una casa domótica te permitirá descubrir todo el potencial de la conexión en remoto a los diferentes aparatos domésticos y la eficiencia de una red de comunicación que permita sacarle el máximo partido al sistema.
Índice de contenidos
La domótica, lo último en tecnología eficiente para el hogar
Ahorrar y ser más eficiente es un paso más hacia la sostenibilidad del hogar. Y esto es más posible que nunca beneficiándote del potencial de la red de comunicación de un sistema de interconexión entre los diferentes aparatos de tu vivienda.
El control centralizado y el análisis de datos de las actividades te permitirá disfrutar de un hogar más eficiente y cómodo acorde a tus necesidades.
¿Qué es la domótica?
La domótica es el conjunto de tecnologías que permiten automatizar un espacio o la vivienda completa de forma inteligente mediante acciones remotas sobre los aparatos electrónicos de la misma, además de permitir la comunicación entre los mismos y un control remoto centralizado por parte del usuario.
¿Cómo funciona una casa domótica?
Aunque pueda parecer complejo, el sistema tecnológico es muy sencillo y tan solo necesita tres requisitos fundamentales: una central de operaciones, una red de aparatos domésticos y una buena conexión a Internet.
Los aparatos deben ser dispositivos con conexión a Internet para que, mediante Wi-Fi, sea posible su control domótico a través de la intercomunicación y el traspaso de información entre ellos.
Saber cómo hacer una casa domótica es muy sencillo.
Es necesario disponer de un centro de operaciones que servirá como punto de mando para dar las instrucciones y para recibir la información de los diferentes aparatos, que pueden ser electrodomésticos, aparatos de climatización del hogar o ventilación, dispositivos audiovisuales y otros muchos, siempre que dispongan de conexión a Internet.
El centro de operaciones procesa la información recibida de los dispositivos y emite órdenes automatizadas que generan acciones preestablecidas previamente por el usuario, permitiendo un mayor confort y calidad de vida de los habitantes de la vivienda.
Un centro de operaciones para convertir tu casa en domótica es algo tan sencillo y presente en nuestro día a día como un teléfono móvil, una tablet o un ordenador.
Mediante este tipo de dispositivos, el usuario programa escenarios domésticos automatizados para la activación de acciones ajustadas a sus necesidades, consiguiendo una red inalámbrica activa que trabaja imbricada ofreciendo lo que se conoce como casa inteligente.
Confort y eficiencia desde tu Smartphone
La domótica incorpora al entorno de la vivienda las nuevas tecnologías a través de un equipamiento mediante el cual el usuario disfruta del control centralizado de todos los aparatos de que dispone su hogar.
A través de la red de comunicación que permite Internet y la centralización de todos los dispositivos a través del panel de control, los habitantes de una vivienda pueden supervisar los datos ofrecidos por su “hogar inteligente“ y activar las órdenes oportunas a cada uno de los aparatos que lo conforman.
Cómo convertir una casa en domótica
En una casa inteligente, el usuario aumenta exponencialmente su confort, comodidad, seguridad y eficiencia energética mediante una correcta comunicación con los dispositivos del hogar a través de la domótica integrada.
Una casa con un buen sistema de domótica incorporado permite gestionar órdenes a distancia por medio del control remoto y programar diferentes respuestas en función de diversos escenarios previstos.
Al hacer tu casa domótica podrás regular la temperatura programando la calefacción o la climatización a través de un termostato inteligente que detecte la proximidad a la vivienda mediante geolocalización o activándolo en remoto desde tu centro de control.
Programar la apertura y cierre de las persianas ya no es ciencia ficción. Las persianas domóticas pueden ser programadas o manejadas a distancia, pudiendo elegir las franjas horarias en función de la climatología o la estación del año.
La iluminación no podía ser menos. Programar las luces es una de las múltiples opciones disponibles para convertir tu casa en domótica. Disminuye la luz automáticamente, enciéndela o acompaña la intensidad con un cambio gradual de la temperatura con la ayuda de un termostato inteligente.
El sistema de video vigilancia conectado a la central domótica te permitirá mantener un control absoluto sobre la seguridad de tu hogar y programar las acciones sobre los dispositivos a tu gusto y desde cualquier lugar.
Utilidades de convertir una casa en domótica
La comodidad de gestionar los aparatos de tu hogar desde un único dispositivo no es la única bondad de este avance tecnológico doméstico.
Además de una mejora del bienestar del usuario, el modo en cómo funciona una casa domótica permite una mayor eficiencia del hogar y un ahorro sustancial en materia energética.
1. El ahorro energético inherente a hacer tu casa domótica
El Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía (IDEA) ha publicado que convertir una casa en domótica permite ahorrar dinero y energía en electricidad, combustibles y agua.
La gestión inteligente del agua (tanto la sanitaria como la reservada al riego), así como la climatización o la iluminación permite seleccionar tarifas horarias menos costosas y reducir la factura eléctrica y la huella contaminante.
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2. Climatización y domótica
Una de las mayores aplicaciones domóticas en el hogar está relacionada con la climatización.
El control de todos los equipos de ventilación, purificación y climatización del hogar a través de un único dispositivo móvil permite utilizar estos dispositivos de forma eficiente.
3. Calefacción automatizada mediante la domótica
La automatización de los sistemas de regulación de la calefacción permite adaptar los valores exigidos en función de la temperatura externa, la habitabilidad o la hora del día, sacando el máximo partido al calor en el hogar y sin derroches innecesarios de recursos energéticos.
4. Domótica para la eficiencia solar energética
El control inteligente de elementos como persianas, toldos, cortinas o ventanas permite un mayor aprovechamiento de la luz natural y la energía solar, ahorrando costes y optimizando los recursos naturales.
Además la domótica nos permite tener el control de la apertura y cierre de ventanas, no solo por una mera cuestión de comodidad o seguridad, sino para detectar elementos abiertos cuando se activa el sistema de climatización y evitar sobrecostes.
Características de la domótica que optimizan la gestión doméstica
La seguridad es una plusvalía de la domótica, ya que los aparatos conectados al sistema disponen de sensores que permiten un control a distancia de la vivienda y la programación de respuestas automatizadas ante intrusiones o incidencias.
Monitorear el consumo energético global para optimizar el consumo mediante una gestión eficiente es uno de los mejores ejemplos de cómo funciona una casa domótica de forma eficaz.
La comodidad de disponer de una central domótica que controle, programe y gestione de forma automática las tareas del hogar es una de las grandes ventajas de convertir una casa en domótica, ya que no requiere de conocimientos y capacidades específicas y es fácil de utilizar por cualquier usuario.
Por ello y sin lugar a dudas la domótica es un avance tecnológico sumamente interesante para el hogar.
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