Mantener la temperatura y la humedad ideal en la habitación del bebé para que sea un espacio confortable y saludable es fundamental.
Ambos factores influyen en su salud, por lo que es muy importante mantener ambos parámetros dentro de los niveles aconsejados para que los más pequeños de la casa crezcan en un entorno saludable.
Índice de contenidos
¿Cuál es la temperatura y humedad ideal para un bebé?
Al igual que en cualquier espacio de la casa, la temperatura ideal de la habitación de un bebé debe oscilar dependiendo del momento del día.
Los valores aconsejados para una sensación térmica agradable en la habitación del bebé son de entre 20º y 24º C de temperatura durante el día y los 18º y 20º C de temperatura durante la noche.
Pero si la temperatura es un aspecto importante para crear una atmósfera de confort para el bebé, no menos relevante es la humedad. De hecho, se trata de un factor a tener muy en cuenta, ya que incide directamente sobre la salud de todos los miembros de la casa.
Los niveles de humedad, según los parámetros saludables establecidos, deben mantenerse entre el 40 y el 60% de humedad ambiental. Una proporción menor al límite inferior puede causar sequedad en la piel del bebé y problemas respiratorios.
Por el contrario, el exceso de humedad también resulta perjudicial en el hogar. Un valor de humedad superior al 60% será la puerta de entrada para ácaros y hongos, además de malos olores y una poco confortable sensación térmica.
Para medir los niveles de humedad, la manera más efectiva es hacerse con un higrómetro digital.
Si la habitación del bebé presenta un bajo porcentaje de humedad, lo mejor es comprar un humidificador para bebés que ayude a mantener los niveles adecuados.
Incluso hay modelos con higrómetro incorporado que te permiten conocer los valores de humedad ambiental y ver si hay fluctuaciones en la humedad relativa de la habitación del bebé.
Qué es un humidificador y para qué sirve
Un humidificador es un aparato eléctrico fabricado para aumentar el nivel de humedad relativa en una estancia. Este dispositivo se usa para mantener un porcentaje de humedad relativa constante.
En el interior de una casa también se producen estados de contaminación ambiental, al igual que en el exterior, e incluso mayores. Una incorrecta ventilación, productos de limpieza agresivos y otros factores pueden mantener enrarecido el aire del hogar.
El humidificador convierte en vapor el agua de su depósito para limpiar el aire y reducir los agentes contaminantes, ayudando a conseguir la temperatura y la humedad ideal para un bebé.
Sueños felices con un humidificador
No hay nada peor que una larga noche con un bebé que se siente incómodo y no da conciliado el sueño.
Un humidificador ayudará a tu bebé a dormir mejor, ya que su proceso de restauración de la humedad relativa favorecerá su respiración e incluso evitará posibles irritaciones dermatológicas.
Muchos humidificadores tienen un temporizador incorporado para que puedas programar las horas en que necesitas que se mantenga operativo y mantenga las recomendaciones del valor de humedad ideal para dormir los bebés.
¿Puedo usar un humidificador en la habitación del bebé?
Sí. Y no solo puedes, sino que debes. La llegada de un bebé a casa implica mantener especialmente controlados los niveles de temperatura y humedad, sobre todo en las zonas en las que el bebé pasa todo el día.
Durante los primeros meses de vida, el bebé pasa la mayor parte del tiempo en casa, ya que aún no ha desarrollado por completo su sistema inmunológico y carece de los anticuerpos necesarios para mantener su salud protegida.
En cualquier vivienda, por limpia que esté, pueden proliferar ácaros y hongos debido a la humedad ambiental excesiva o un entorno demasiado seco debido al uso de calefactores, chimeneas o la propia climatología exterior.
Al mantener la humedad ideal para la habitación de un bebé con un humidificador estamos blindando la salud del pequeño y asegurando un ambiente de bienestar y confort para él y para toda la familia.
Tipos de humidificadores
En el mercado, la oferta de humidificadores se agrupa en dos modelos: los humidificadores de vapor caliente y los de vapor frío, que incluyen a los humidificadores ultrasónicos y los evaporativos.
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Humidificadores de vapor caliente
Su procedimiento es similar al de una olla hirviendo, para que te hagas una idea. Calienta el agua del depósito y, una vez en su punto de ebullición, esta se evapora por la habitación.
Si bien es verdad que cumple el objetivo de aumentar la humedad relativa, los contras de este tipo de humidificador lo hacen totalmente desaconsejado para mantener la humedad ideal para la habitación de un bebé.
La operatividad de un humidificador de vapor caliente es más lenta que los modelos de agua fría, ya que el agua tiene que alcanzar la temperatura necesaria para generar vapor.
Y esa temperatura del vapor de agua es demasiado elevada, por lo que constituye un riesgo toda vez que cualquiera, y en especial los niños, puedan quemarse por contacto.
Además de calentar la estancia debido a la temperatura del agua, lo cual puede ser un inconveniente en verano, humedece las paredes y podemos causar un problema de humedad si hacemos un uso continuado.
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Humidificadores de vapor frío evaporativos
Su funcionamiento se basa en la conducción del aire seco a través de un filtro de mecha húmedo situado en su interior para, toda vez que el aire está húmedo, expulsar la humedad y distribuirla por la estancia con la ayuda de un sistema de ventilación.
El filtro de mecha retiene algunas de las impurezas presentes en el aire para expulsar vapor limpio.
Debemos tener en cuenta la humedad del entorno de la vivienda, ya que el funcionamiento de estos dispositivos es mediante la absorción de aire seco. Un exceso de humedad causará un funcionamiento irregular.
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Humidificadores ultrasónicos
Gracias a una serie de movimientos ultrasónicos, el transductor provoca una vibración en el agua que causa la ruptura de las moléculas, lo que generará un vapor fino y respirable.
Para conseguir estos resultados sin perjudicar la salubridad del vapor, debe cargarse el dispositivo con agua destilada o embotellada. Es el dispositivo más aconsejable para conseguir la humedad ideal para la habitación de un bebé con un humidificador.
Como ves los beneficios de usar un humidificador son muchos tanto para la salud de tu bebé como para su descanso. Y sabiendo esto, ¿quieres un humidificador para tu pequeño? ¡No dudes en ponerte en contacto con nosotros para lograr el mejor ambiente posible!
Christina G. Nogueira
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